Hay un dicho popular que dice que «Madre no es la que engendra sino la que cría», y en 1946 el director Ismael Rodríguez nos lo dejó muy claro en ¡Los tres García!, comedia ranchera en la que Pedro Infante, Abel Salazar, y Víctor Manuel Mendoza interpretan a 3 primos rebeldes, nietos de doña Luisa García (Sara García), una estricta mujer que siempre los pone en su lugar.
En esta cinta, Sara García consolidó su papel como la matriarca por excelencia del cine mexicano, pues retrató con fidelidad el carácter de las abuelas y, a la vez, el sentido protector que tienen con sus nietos, a pesar de que sean un desastre.
Doña Luisa cria a sus 3 nietos como si fueran sus hijos, así que con puro en la boca, bastón en mano y crucifijo en el pecho, lanza órdenes inapelables que resuenan en toda la casa y alinean cual soldados a Luis Antonio, José Luis, y Luis Manuel.
Como toda abuela, aunque no lo quiera admitir, doña Luisa también tiene un consentido: Luis Antonio (Pedro Infante), el nieto más sinvergüenza y mujeriego que le promete amor a todas, aunque se desvive por su abuela, dejando claro que ella es su único y más grande amor.
La escena en la que Luis Antonio interpreta ‘Dicen que soy mujeriego’, coqueteando con las mujeres, pero poniendo por delante a su abuela se convirtió en una de las más populares de la película, pues además de ser un tema en la voz de Pedro Infante, es un ejemplo cómico del amor maternal, que muy a la mexicana, le profesan todos los hombres por más machos que parezcan, a su madre.
Cuando Lupita Smith (Marga López), la prima extranjera de los García llega y los enamora a los 3, es doña Luisa quien debe jalarles las riendas y mantener ante todo la unión familiar. Los primos podrán pelear a muerte en una cantina, pero cuando la abuela aparece dando de bastonazos no les queda más que agachar la cabeza y escuchar los fuertes regaños.
Sara García inmortalizó las frases que toda abuela y madre mexicana dice antes de «leerle la cartilla» a sus hijos, y sobre todo, ver aquellas escenas en las que pone en su lugar a los nietos nos hace recordar los regaños que hemos escuchado tras una pelea de hermanos: «Se les debería caer la cara de vergüenza, deberían de portarse bien siquiera por el cariño con el que los crié».
Aunque los 3 nietos tengan personalidades totalmente distintas, el amor de su abuela es el único motivo que los hace conscientes de la unión y cariño familiar que debe existir entre ellos, a pesar de la discordia que los hace pelear.
¡Los 3 García! es una película entrañable que debes ver estas fechas para recordar que una madre no es solamente quien engendra, sino quien dedica enteramente su vida a proteger y darle valores a quien ama.
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