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Los mejores clásicos para armar un maratón de Halloween

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Admitámoslo, la mejor época para sentarse a ver una película es Halloween. No existe nada más emocionante que disfrutar de una buena cinta de terror, horror o suspenso acompañado de tus amigos, hasta de esos que se tapan los ojos en las escenas más escalofriantes.

Para que aproveches todo el mes de noviembre, te recomendamos 10 excelentes clásicos que podrás encontrar en el catálogo de Claro video para que armes el mejor maratón de Halloween:

 

Psicosis (1960)

En 1960, Alfred Hitchcock marcó un antes y un después en el género de suspenso gracias a esta extraordinaria cinta inspirada en la novela homónima de Robert Bloch. La historia sigue a Marion Crane, una mujer que en su afán de escapar con su novio comete un robo y se esconde en el Motel Bates sin esperar que ahí conocerá a Norman Bates, un misterioso hombre atormentado por un oscuro pasado.

Los pájaros (1963)

Hablando sobre el padre del suspenso, no podemos olvidar este clásico que también horrorizó a la generación de los sesenta; en especial a los amantes de las aves. La historia gira en torno a Melanie Daniels, una joven de alta sociedad que tras comprar unos periquitos para conquistar a un apuesto abogado, descubre que la maldad puede apoderarse de cualquier cosa, hasta de las inocentes criaturas aladas que tanto aprecia.

Vampiros (1998)

Olvídate de la imagen de vampiros que te has hecho durante los últimos años con películas tipo Twilight. Este clásico de John Carpenter deja a un lado el sentimentalismo y nos muestra a un grupo de sanguinarios y violentos vampiros liderados por el terrible Valek.

El exorcista (1973)

Otro clásico del cine de terror que no debemos ignorar estas fechas, sin importar cuántas veces nos haya erizado la piel anteriormente. No existe hasta la fecha otra cinta sobre exorcismos capaz de igualar lo que Linda Blair nos hizo sentir en 1973 con las impactantes escenas en las que era poseída por un demonio.

Frankenstein (1931)

Si quieres conocer el origen del monstruo del Dr. Frankenstein, entonces debes ver este extraordinario clásico de 1931 basado en la novela de Mary Shelley. La historia comienza con los experimentos del doctor Henry Von Frankenstein, quien desea crear un nuevo ser humano utilizando restos de cadáveres. Lo único que no sabe es que el cerebro que le ha puesto a su nueva creación pertenecía a un criminal.

El resplandor (1980)

No importa cuántas veces veamos esta joya de Stanley Kubrick, basada en la novela homónima de Stephen King, siempre va a ser espeluznante recordar a Jack Nicholson perdiendo la cordura en el misterioso hotel donde intenta asesinar a su familia.

La cosa (1982)

Esta es otra cinta que no debe pasar desapercibida estas fechas. Se trata de un clásico de John Carpenter, que desde 1982 ha fascinado a todos los amantes del terror y la ciencia ficción. Narra la historia de un grupo de investigadores en la Antártida que descubren que una extraña criatura, que había estado bajo la nieve desde hace 100,000 años, acaba de descongelarse y es una amenaza mortal. ¿Lo más escalofriante de todo? «La cosa» es capaz de tomar múltiples formas de vida.

Alien: el octavo pasajero (1979)

En 1979, Ridley Scott hizo trizas los nervios de toda la audiencia con este clásico de la ciencia ficción. Narra los aterradores momentos que vive la tripulación de la nave comercial Nostromo al llevar a bordo una criatura alienígena que planea aniquilarlos a todos.

La mosca (1986)

Si tienes amigos con estómago débil diles que se preparen para ver esta cinta clásica de los ochenta. En ella un científico que quiere experimentar con la teletransportación se convierte, sin querer, en un repugnante hombre mosca. Ser testigos de su metamorfosis es realmente asqueroso.

El aro (1998)

Si te gustó la versión de El aro que Naomi Watts protagonizó en 2002, entonces debes ver la historia original de Japón que fue todo un éxito  a nivel mundial gracias a las impactantes escenas que sin duda alguna volverán a erizarte la piel.

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Los temas musicales más emblemáticos del cine de terror

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Para que una película de terror perdure en nuestra memoria no solo es necesaria una buena trama, un asesino o escenas perfectamente planeadas para erizarnos la piel. La música es un elemento fundamental que hace que al final todo tenga sentido.

A continuación te compartimos una lista de los temas musicales más emblemáticos del cine de terror:

‘Tubular Bells’ – El exorcista

El estreno de El exorcista en 1973, marcó un antes y un después en el género de terror. Hoy en día no hay persona que en sus más oscuros pensamientos no tenga presente el rostro endemoniado de Linda Blair, o que no se le erice la piel al escuchar el tema principal de la película, que compuso Mike Oldfield a los 19 años.

‘The Murder’ – Psicosis

Aunque Psicosis (1960) no es una cinta estrictamente de terror, sí influyó en infinidad de películas del género, especialmente por la famosa escena de la ducha, en la que Marion es asesinada a sangre fría mientras suena un aterrador chirrido de violines, violas y violonchelos. La banda sonora de la película de Hitchcock incluso fue votada como «La más terrorífica de la historia cinematográfica» según un sondeo publicado en Gran Bretaña. El emblemático tema es una composición de Bernard Herrmann.

‘The Shining theme’ – El Resplandor

The Shining o El resplandor (1980) es otro clásico del cine de terror que hasta hoy en día sigue provocando pesadillas. El tema principal de la película, compuesto por Rachel Elkind y Wendy Carlos tiene un origen muy peculiar: está inspirado en ‘Dies Irae’ (Días de ira), himno del siglo XIII que describe el día del juicio final.

‘Halloween Theme’ – Halloween

John Carpenter no necesitó más que un piano y un sintetizador para componer el desesperante tema principal de la película Halloween (1978), también dirigida por él. Carpenter estuvo a cargo de la composición total de la música de la película y el score, inspirado en las bandas sonoras de Suspiria y El exorcista.

‘Jaws theme song’ – Tiburón

Tiburón es una película de suspenso, sin embargo, el tema principal compuesto por John Williams se hizo icónico con el paso de los años. La banda sonora incluso ganó un Óscar, y fue considerada dentro del Top 10 de «Las bandas sonoras más memorables de la historia del cine», según el American Film Institute en 2005.

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Psicosis: las consecuencias de un exagerado amor maternal

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En 1960, Alfred Hitchcock reinventó el género de terror con Psicosis, cinta que no solo desafió la manera de mostrar un asesinato a sangre fría en la pantalla grande, sino que demostró que el amor maternal no siempre es tan bueno e inofensivo como se cree.

La historia desde el inicio nos hace cómplices del robo que comete Marion Crane (Janet Leigh), motivo por el cual huye hasta llegar al Motel Bates en donde se registra con un nombre falso. La trama de aventura criminal se interrumpe abruptamente para presentarnos a Norman Bates (Anthony Perkins), el dueño del lugar, quien de inmediato siente una profunda atracción hacia la hermosa chica.

Luego de una majestuosa y violenta escena de asesinato en la que Marion es apuñalada en la regadera, sentimos compasión por Norman, quien debe limpiar la escena del crimen cometido por su madre enferma de celos. Sin embargo, no es hasta el final de la película que comprendemos que todo se trató de una relación codependiente entre Norman y su madre.

Norman creció bajo la estricta y sobreprotectora educación de su madre soltera, así que desde el inicio se formó un fuerte vínculo en el que el protagonista asumió el papel protector de su figura materna; de tal forma que cuando ella comienza a tener una relación sentimental, es Norman quien ve amenazado su papel, y lleno de celos y odio comete un doble asesinato.

«Si quieres a alguien no lo dejas aunque lo odies». Norman no pudo superar la traición de su madre, y aunque sigue guardando rencor, se arrepiente de haberla matado y decide regresarla a la vida de la manera más siniestra: tomando su imagen y personalidad.

A lo largo de la trama, Hitchcock nos muestra con sigilo las escenas en las que Norman y su madre discuten porque ella se niega a que su hijo sostenga una relación con una mujer. Norman asume que su madre tampoco querría que él encontrara una amante, así que es capaz de interpretar las palabras con las que ella lo habría impedido:

—»¡No! ¡Te digo que no! ¡No traerás a jovencitas a casa a cenar! ¡A la luz de las velas, supongo… de forma baja y erótica como los hombres con mentes bajas y eróticas!
¡Mamá, por favor!
¿Y después de cenar qué? ¿Música? ¿Susurros?
Mamá, solo es una extraña. Tiene hambre y está lloviendo.
Mamá, solo es una extraña. Como si los hombres no desearan a las extrañas…»

De esta manera, Norman establece una claustrofóbica relación de celos en la que su personalidad se divide para ser madre e hijo al mismo tiempo. Ambos se protegen… hasta la muerte.

La cinta de Hitchcock inspirada en la novela homónima del escritor Robert Bloch es una de las historias de terror y suspenso más extraordinarias del séptimo arte. Si quieres revivirla, te invitamos a hacerlo por Claro video.