Tin Tan: el comediante que era pura música

‘Los muchachos me dicen Tin Tan, porque en mí todo es música’, solía decir Germán Valdés, y para quienes hemos tenido la fortuna de ver su trabajo, entendemos que no es simplemente una frase al azar. El comediante que comenzó su carrera cinematográfica a inicios de la década de los 40, y terminó consagrándose en la cima del cine mexicano, poseía una magia innegable ante la cámara.

El 19 de septiembre recordamos el nacimiento de esta mítica figura de la época del cine de oro nacional, y festejamos la ocasión haciendo un recorrido por los aspectos generales de su fantástica vida:

1. Origen y familia. Germán Valdés fue el segundo hijo de nueve, y quizá uno de los datos más conocidos es que es hermano de otros grandes talentos que la familia Valdés aportó al mundo de la televisión, como Manuel El loco Valdés y Ramón Valdés, quien diera vida por muchos años a ‘Don Ramón’ en la serie de El Chavo del 8. El actor nació en la Ciudad de México, aunque gran parte de su vida la pasó en la frontera con Estados Unidos debido al trabajo de su padre, quien era un agente aduanal. Gracias a la influencia del choque cultural entre mexicanos y estadounidenses, Germán Valdés se consagró con el papel del Pachuco de Oro.

2. Éxito profesional y fama. En total, fueron 105 películas en las que participó Tin Tan. Dentro de las cintas de mayor éxito que realizó el comediante figuran Calabacitas tiernas, El rey del barrio, El hijo desobediente, La marca del zorrillo, Las aventuras de Pito Pérez, El Ceniciento, El bello durmiente y la divertidísima Mátenme porque me muero. Su talento lo llevó y consagró en la cima del cine mexicano, llevándolo a trabajar con las principales personalidades de aquella época como Tongolele, Rosita Quintana, Vitola y Silvia Pinal. Aunque inició ganando poco, Tin Tan llegó a recibir hasta 100,000 dólares extras al año por enviar sus películas a otros países, por lo que podía darse el lujo de hacer viajes repentinos a Europa, comprar un Cadillac cada año y pasear en su yate.

3. Legado. Además de sus películas, aún podemos disfrutar del trabajo del también llamado El rey del barrio a través de sus doblajes, siendo uno de los más recordados el del oso Baloo en ‘El libro de la Selva’ de Disney en 1967. Tin Tan se puede escuchar también en el personaje de O’Malley en Los Aristogatos de 1970 y en la voz del pequeño Juan en Robin Hood. En la escena musical, su grabación más famosa es la canción «Bonita», de Luis Arcaraz, quien alguna vez declaró que la mejor interpretación de su obra se la debía al cómico pachuco. Hace algunos años, su hija Rosalía Valdés recopiló a través del documental Tin Tan a 40 años los momentos más memorables de su padre.

Si quieres divertirte con las grabaciones musicales de este gran artista, no dejes de visitar Claro música. Además, da un cercano seguimiento a la compleja trayectoria del inolvidable Pachuco de Oro a través del documental Ni muy muy, ni tan tan…Simplemente Tin Tan, disponible en Claro video aquí.